¿QUIÉNES DIRIGEN LA EDUCACIÓN EN MADRID?

(Llegado a través de Internet, sin firmar)

A estas alturas, el nombre de Lucía Figar ya es bien conocido; no tanto su trayectoria. A Alicia Delibes no la conoce casi nadie, aunque sea ella nuestra verdadera jefa y quien está detrás de los recortes y de la opción privatizadora. Lucía Figar no sabe nada de Educación (dudo que conozca el sistema educativo español más que por encima, como tantos políticos metidos en lo mismo). Sólo aplica las recetas que le pasa Delibes. No os perdáis estos esbozos biográficos de dos aspirantes a ministras de Educación...

• Excma Sra. Doña Lucía Figar de Lacalle. Consejera de Educación. Licenciada en Ciencas Económicas y Empresariales. Casada con Carlos Aragonés, Director del Gabinete de Presidencia del Gobierno con José María Aznar, de quien ella misma fueasesora. Madrina de uno de los nietos del expresidente, participó con Alejandro Agag en las reuniones de cachorros neoliberales del llamado clan de Becerril, por donde se dejaban caer en ocasiones comoorganizadores de eventos dos buenos amigos del yernísimo: FranciscoCorrea y Álvaro Pérez, alias El Bigotes. Véase este enlace: http://www.elpais.com/articulo/madrid/amigos/Becerril/elpepiespmad/20090215elpmad_1/Tes
• Como ya es de sobra conocido, durante el mes de agosto de 2010, Lucía Figar explicó en Rimini (Italia) sus planes privatizadores en un congreso del grupo ultracatólico Comunión y Liberación. Su intervención está grabada en vídeo: http://leeyopina.wordpress.com/2010/10/14/lucia-figar-explica-a-comunion-y-liberacion-sus-planes-privatizadores-en-la-comunidad-de-madrid/
• Alicia Delibes (la que corta el bacalao). Directora General de Ordenación Académica en la Consejería de Educación de la CAM. Viceconsejera de Educación de la CAM. Casada con Regino García-Badell (quien fue asesor de Aguirre en el Ministerio de Educación y actualmente redacta los discursos de La Presidenta por antonomasia), sobrino de Carlos Arias Navarro, presidente del Gobierno bajo la dictadura de Franco. Catedrática de instituto, dejó la tiza y se pasó a periodista en la COPE y en Libertad Digital, siempre de la mano del adalid de la moderación y del consenso llamado Federico Jiménez Losantos. Las conexiones familiares y los encendidos artículos contra el sistema educativo nacido de las leyes socialistas la catapultaron a la política.
• La entretenidísima biografía no autorizada de Alicia Delibes la tenéis aquí: http://recuperarmadrid.blogspot.com/2008/05/alicia-delibes-y-de-las-faes.html
• Una lista de sus colaboraciones aquí: http://www.libertaddigital.com/opinion/alicia-delibes/
• Una perla de muestra: "A vueltas con la calidad de la enseñanza” (09/05/2002) define así Colegio de calidad:“colegio privado con buenos profesores,mayor o menor nivel de exigencia, que se haga deporte, que se aprenda bien inglés, que se imparta, o no, una enseñanza religiosa,etc”.
• Alicia Delibes también tiene su vídeo. No hay nada como escucharla para entender lo que está pasando en la educación de Madrid. La entrevista está a partir del minuto 24:22 http://www.youtube.com/watch?v=rrVpjZWfbNg
• Aunque la entrevista trata en teoría sobre educación, no para de hablar de política: que si los profesores hemos abdicado de las ideas de autoridad y de disciplina, porque somos de izquierdas, que si la culpa es de Mayo del 68, etc.... Personalmente esperaba algo más original de nuestra jefa. Sus opiniones son rancias y tópicas, de reunión de maitines, de ideario resumido en cuatro líneas para que el político de turno sepa qué opinar de cualquier tema: la crítica, de buen tono neoliberal, al 68 (cita mucho a Francia sin mencionar cuánto lo valoran allí, donde siempre se ha respetado mucho más a los profesores que aquí); la crítica al sistema comprensivo, el que de hecho nunca ha llegado a desarrollarse en la CAM porque su consejería le dio la puntilla hace tiempo fomentando los conciertos educativos que crearon los socialistas; que no todos somos iguales, que hace falta mano de obra, que para qué educar a los que no quieren educación, etc.
  
• En fin, la Figar, sí; pero no olvidemos quién mece la cuna.